No me digas que tu no has practicado besos con el espejo, que no has rozado con tus labios el dorso de la mano o la muñeca. No me digas que no has sentido cómo tus labios se hinchan anticipando el contacto, presintiéndolo, anhelándolo.
¿Sabes que puede romper el hechizo? Una boca que no esté preparada, limpia, fresca y jugosa. Unos dientes manchados, un aliento espeso o unos labios resecos pueden dar al traste con todos tus maravillosos sueños. Todos los preparativos, trampas amorosas, todos los juegos de seducción y los vestidos vaporosos…al traste.
Está claro que para besar bien hay que ir primero al dentista
Pasa por la consulta para que todo esté perfectamente sano y te hagan una buena limpieza. Si además te haces un blanqueamiento y un rejuvenecimiento de tus labios para que luzcan más jugosos, fantástico. Pero lo que no debes olvidar es:
Lávarte los dientes tras cada comida, beber abundante agua, hidratar tus labios, no abusar del café, te, alcohol y tabaco y llevar encima unos chicles para cuando cepillarte los dientes no sea posible. Te quieren besar a ti, no a un cenicero, ni a un tonel de ron y tampoco al tal Manuel que molía café.
Y ahora que el material está en condiciones…tiraremos de manual para depurar la técnica.
El Arte de Besar
En 1936, un hombre llamado Hugh Morris publicó un panfleto ilustrado titulado The Art of Kissing. Este librito proponía a los hombres jóvenes de la época, técnicas y trucos para besar a las tiernas doncellas.
“Como una abeja que se posa sobre los fragantes pistilos de una flor, y liba el néctar de la miel, así debes beber el néctar de entre los labios de tu amor”
El Arte De Besar incluye una multitud de variedades de besos como “el beso espiritual”, “el beso bailarín”, “el beso pellizco”, “el beso de dolor”, “el beso sorpresa”y “el beso de la pestaña ” . Nos encontramos también con consejos acerca de la manera en la cual besar a los distintos tamaños de boca. Todo envuelto en el candor no exento de picardía de principios del siglo pasado.
Si quieres practicar el “beso aspiradora” o el “beso de alma francesa” tendrás que descubrir sus secretos en este, ahora, simpático y decadente librito. Y no creas que son inocentes besitos por aquello de que el libro es antiguo. Nuestros antepasados eran más apasionados de lo que queremos pensar.
Aunque en aquellos tiempos no les resultaba tan fácil ni cómodo acudir al dentista, afortunadamente comían menos dulces que ahora. Hoy en día, con modernos tratamientos indoloros y mucho más asequibles que entonces, se hace casi imperdonable no prepararnos para besar en condiciones.
Como vemos también hay besos para celebraciones especiales, ¡no se puede usar el “beso del pulpo” todos los días!
Catálogo de besos
Hay coleccionistas de besos. También hay quien besa a lo loco, sin ton ni son. Incluso hay maniáticos del orden a quienes les gusta tenerlo todo bien catalogado y en su lugar de la estantería. Esto último es lo que le pasa a Raquel Díaz Reguera que los ha puesto todos ordenaditos en tarros de cristal. Será para salvaguardar su frescura al tiempo que el recuerdo del instante.
Porque cada beso tiene su emoción y su significado. Los mejores besos son aquellos que recordamos como dulces, suaves y frescos. Nadie guarda un beso con sabor a muela picada entre las hojas de su diario.
“Los labios, el interior de la boca y la lengua son de las zonas más exquisitamente sensibles del cuerpo humano”, según el Instituto Kinsey para la Investigación sobre la Sexualidad.
Lo cierto es que durante un beso se ponen en funcionamiento aproximadamente 30 músculos faciales. Durante el beso se produce un intercambio asombroso de información. Olor, temperatura, textura, sabor….son detectados por nuestra boca cuando entra en contacto con la boca del otro. Un montón de información transmitiéndose, un montón de información que nos interesa que sea apropiada, aceptada y cuente cosas buenas de nosotros. Sanos, limpios, deseables…son algunas de las cosas que nos gustaría transmitir ¿verdad?
En Artedental te ayudamos a que prepares tus armas para la seducción. Todo un equipo de especialistas a tu servicio para que tus besos sean frescos o cálidos pero desde luego bonitos, saludables y……¡que den ganas de repetir!
¡ Claro que algo tendrás que poner de tu parte!